10 Jun Una vida dedicada a los ecosistemas marinos
Watson (Lesley Chilcott, 2019)
Watson parte de un inicio contemplativo que muestra la majestuosidad de las ballenas a medida que el discurso se acelera y va cuestionándose algunas preguntas cómo la de si estos mamíferos son capaces de entender de lo que somos capaces como especie, generando un debate, al mismo tiempo, sobre si tienen capacidad para el pensamiento. Tras divagar sobre ello, el documental que ya ha ido creciendo rítmicamente, empieza a mostrar imágenes de archivo de enorme violencia.
Posteriormente, el filme nos traslada con Paul Watson, activista medioambiental que es considerado por algunos países como ecoterrorista. Lo que empezó como una suma a los movimientos pacifistas y antinucleares relacionados con el mundo hippie, acabó con la fundación de Greenpeace y su división en diferentes sectores ideológicos y metodológicos. Es precisamente esto lo que propicia la fundación de Sea Shepherd por parte de Watson, con el objetivo de intervenir en las actividades ilegales que desarrollan las flotas pesqueras de algunas naciones.
Siguiendo el recorrido y la evolución de Watson como activista, el documental nos muestra imágenes de una violencia explícita que cautiva y que provoca al espectador. Sus imágenes te generan ganas de quitar la mirada, pero más que eso lo que acaba provocando es una angustia existencial que nos vincula a la raíz del problema y que nos hace querer ser partícipes del cambio.
Sin duda, lo más interesante del documental es la intriga que genera la historia personal de Paul Watson, que de una forma muy voyeur nos está mostrando la vida privada del activista, para exponer sus controversias como persona, pero también para reivindicar las injusticias que ha sufrido. Watson, al que se le pueden achacar algunos procedimientos cuestionables, lo único que pretende es luchar por la fauna y flora marina –“todo lo que haga en mi vida será por ellos” llega a decir– sin importar del todo los métodos y las formas, recalcando continuamente que para conseguir resultados hay que ir hasta el límite.
-Santi Lecuona